Hola, bienvenido al blog de Clínica Séptima Dental. En esta ocasión, tratamos los primeros dientes del bebé y a continuación expondremos 7 cosas que debe saber sobre ello.
El cuidado de nuestra dentadura es primordial para evitar tener problemas de salud. Las afecciones dentales pueden derivar en enfermedades que repercutan en nuestro bienestar general, por lo que hay que tratar de vigilar que no se presenten síntomas y emplear medidas preventivas para evitarlas.
Por estos motivos es de gran importancia que controlemos la salud dental de nuestros hijos desde su más tierna infancia. En este artículo hablaremos sobre 7 cosas que los padres deben tener en cuenta a la hora de cuidar de la salud dental de sus bebés desde que le salen sus primeros dientes.
1. El primer diente del bebé
Los primeros dientes del bebé son muy importantes. Aunque hay un amplio espectro de tiempo en cuanto a cuándo suele aparecer el primer diente en los bebés, la mayoría comienzan a desarrollar sus piezas dentales entre los seis y doce meses de edad. Existen casos en el que incluso se supera el año de edad, que aun siendo menos frecuente, tampoco debe causar preocupación en los padres este pequeño retraso en la aparición de los dientes.
Sobre los tres meses de edad aproximadamente, los recién nacidos comienzan a experimentar con sus manos y empiezan a llevárselas a la boca. Esto, al contrario de lo que se supone, no indica en ninguna manera que al pequeño le esté saliendo su primer diente. Es a los seis meses cuando esto sucede y normalmente los primeros dientes en salir son los incisivos de abajo. Poco a poco comenzarán a surgir el resto de piezas dentales (conocidos como “dientes de leche”), completándose toda la dentadura del niño a los tres años de edad.
2. La importancia del flúor en la dieta
Los primeros dientes del bebé y la importancia del flúor en la dieta. Conocemos la gran relevancia que tiene el flúor para prevenir la aparición de caries dentales. Este mineral ayuda a endurecer el esmalte de los dientes y suele estar presente en el agua corriente potabilizada y tratada para permitir el consumo humano de la misma en nuestros pueblos y ciudades.
Por eso, es conveniente que se añada a la dieta del bebé a partir de los seis meses el agua del grifo para acompañar las primeras comidas sólidas. Si tiene dudas sobre si el agua de su localidad es tratada con flúor, consúltelo siempre con su pediatra. La mayoría de las aguas embotelladas no suelen contener este mineral tan importante para nuestra salud dental.
3. Cómo aliviar las molestias de los primeros dientes
La aparición de los primeros dientes no suele provocar demasiadas alteraciones y dolores en los bebés. Sin embargo, en ocasiones pueden causar cierta incomodidad en los pequeños. Para estas ocasiones particulares existen algunas acciones que podemos hacer para paliar en lo posible estas molestias.
Una cosa que los padres pueden hacer es masajear suavemente las encías del bebé, introduciendo sus dedos (asegúrese de lavarse las manos primero) en la boca del pequeño.
Los anillos de dentición sólidos para morder o una toalla limpia humedecida son también una posible solución que ayude a calmar los dolores bucales del niño. En cualquier caso, si el dolor persiste, visite siempre a su pediatra de confianza.
El proceso de desarrollo y salida de los dientes puede provocar una cierta inflamación de carácter leve en la zona emergente del diente, además de una ligera subida de la temperatura corporal del pequeño. Esta medida de temperatura nunca debe superar los 38 grados centígrados si es un síntoma de la salida de los dientes. Si supera esta temperatura, acuda a su pediatra, pues lo más probable es que la causa de este incremento se deba a otra razón, como una infección u otro tipo de dolencia.
4. Evite emplear pastillas para la dentición
No se recomienda utilizar ningún tipo de pastillas para la dentición, geles con benzocaína o geles y pastillas homeopáticas. Si quiere emplear pastillas de dentición para paliar las molestias que implican el desarrollo de los dientes tenga cuidado y vigile que no contengan benzocaína ni belladona, pues su ingesta podría provocar una grave intoxicación en el pequeño.
Además, no se recomiendan los collares de ámbar para la dentición. Los collares que se colocan alrededor del cuello de un bebé suponen un riesgo de estrangulación que puede provocar ahogo y asfixia.
5. Cepille los dientes a su hijo
Para evitar en lo posible la aparición de caries u otras afecciones bucodentales, lo mejor es realizar una limpieza exhaustiva y periódica de las piezas dentales. Esto también es aplicable a los primeros dientes de los bebés.
Desde la aparición del primer diente en su bebé, trate de cepillarle las piezas dentales dos veces al día con una pasta de dientes que contenga flúor en su composición. Para ello, haga un frotis en los dientes con la pasta dental. Emplee una dosis pequeña, del tamaño de un granito de arroz.
Una vez que su hijo cumpla los tres años, es recomendable que se utilice una cantidad de pasta dental con flúor del tamaño de un guisante para el cepillado dental. En cuanto sea posible, enseñe a su hijo a escupir el exceso de pasta dental. Encárgese usted mismo de la higiene buco dental de su hijo hasta que sea lo bastante mayor para aprender a cepillarse el mismo (a partir de los 6 años aproximadamente).
6. Consulte siempre a su pediatra
Es habitual que el pediatra revise los dientes y las encías de los pequeños durante las visitas periódicas de control del niño. Nadie mejor que este profesional médico puede orientarle y aconsejarle sobre cualquier tema referente a la salud dental de su hijo.
Existen estudios que recomiendan la utilización de barniz de flúor sobre los dientes recién salido para prevenir la aparición temprana de caries. Si su hijo aún no tiene un dentista asignado, consulte sobre este punto con su pediatra para que pueda evaluar sobre la conveniencia de aplicar barniz fluorado en la dentadura de su hijo.
7. Lleve a su hijo al dentista con regularidad
Trate de llevar a su hijo al dentista pediátrico tras la aparición de su primer diente y antes de su primer cumpleaños. Un dentista pediátrico se asegurará de que el desarrollo de la dentadura del niño se produzca de manera normal para que no haya problemas dentales.
También es quien mejor puede aconsejarle sobre la higiene bucodental de su hijo. Los primeros dientes del bebé son muy importantes, y tras usar estos 7 hábitos que debe adquirir, su salud será correcta y adecuada.
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